pastor

Descubrí el jengibre.
Descubrí un sábado solo en mi casa.
Descubrí que puedo ser guapo y deseable.
Descubrí que era verdad que soy solo.
Descubrí que mis colegas son mediocres y prefieren la parafernalia al conocimiento.
Descubrí que puedo ser más cínico de lo que pensaba.
Descubrí que a pesar de todo puedo ser interesante durante una conversación, siendo autentico y apasionado.
Descubrí que no quiero poder ni dinero.
Descubrí que estoy de verdad flaco.
Descubrí que la casa de mis padres no será mi casa siempre.
Descubrí que estoy siendo un poco anoréxico.
Descubrí que puedo excitar.
Descubrí que tengo menos complejos en la cama de los que creía.
Descubrí que mi hermana era una oportunista.
Descubrí que si no grito no me escuchan.
Descubrí que aunque me escuchen igual no me entienden.
Descubrí que es cierto que tengo matriz de alcohólico.
Descubrí que me da lata trabajar.
Descubrí que la espinaca cruda y la rucula van bien en una ensalada.
Descubrí nuevas facetas de mi viejo que me hacen odiarlo aun más por mantenernos y mantenerme al margen de todo eso.
Descubrí que la gente se acuerda de mi cara, pero no de mí, ni de mi nombre.
Descubrí que uno debe prostituirse si quiere llegar lejos.
Todo eso lo descubrí en los últimos días.
Quien sabe que vendrá ahora.