pastor

100 chilenos que dan o darán que hablar o sencillamente la llevan, a mi juicio claro, sin un orden determinado, sólo a medida que vienen a mi cabeza:

1.- Benjamín García – Huidobro
2.- Cristián Goich
3.- Alejandro Arrau
4.- Coca Gómez
5.- Tomás Valdivieso
6.- Marcela Fernández
7.- Pablo Díaz
8.- Gerardo Valle
9.- Aline Kuppenheim
10.- Matías Bize
11.- Rafael Urrejola
12.- Alberto Fuguet
13.- Sol Leyton
14.- Ghuillerme Sepúlveda
15.- Peter Pollak
16.- Daniel Greve
17.- Christopher Carpentier
18.- Carolina Urrejola
19.- Rodolfo Edwards
20.- Pablo Simonetti
21.- Francesca Margozzini
22.- Sebastián Zulueta
23.- Consuelo Villalabeitia
24.- Sebastián Arrau
25.- Olivia Allamand
26.- Claudio Orrego
27.- Diego Muñiz
28.- Fernando Bas
29.- Sergio Gómez
30.- Aurelio Montes del Campo
31.- Javiera Parada
32.- Manuela Infante
33.- Karla Rubilar
34.- Pablo Illanes
35.- Colombina Parra
36.- Sebastián Silva
37.- Alvaro Moreira
38.- Andrés Valdivia
39,- Andrés Turner
40.- Verónica Calabi
41.- Gabriel Ebensperger
42.- Matías Oviedo
43.- Luciano Cruz – Coke
44.- Andrés Gómez
45.- Cristóbal Uauy
46.- Laura Pizarro
47.- Rodrigo Jordán
48.- Daniel Matamala
49.- Juan Manuel Astorga
50.- Cristóbal Undurraga
51.- Catalina Pulido
52.- Blanca Lewin
53.- Natalia del Campo
54.- Javiera Parra
55.- Eduardo Alemparte
56.- Vasco Moulian
57.- Felipe Braun
58.- Ramón Montero
59.- Cinthia Miranda
60.- Alvaro Espinoza
61.- Antonio Bravo
62.- Diego Poupin
63.- Adolfo Hurtado
64.- Benjamín Vicuña
65.- Juan Harting
66.- Juan Manuel Tagle
67.- Juan de Dios Larraín
68.- Andrea Belancic
69.- Eugenio Lira
70.- Patricio Navia
71.- Matías Iglesis
72.- Valentina Justiniano
73.- Javiera Díaz de Valdés
74.- Hugo Grisanti
75.- Felipe Castro
76.- Carmen Romero
77.- Cristián Soto
78.- Iván Álvarez de Araya
79.- Luz Croxatto
80.- Patricia Rivadeneira
81.- Marcelo Cicali
82.- Paulo Ramírez
83.- Ramón Griffero
84.- Hernán Rodríguez Matte
85.- Mauricio Fredes
86.- Edmundo Bordeau
87.- Felipe Laurie
88.- Iván Valenzuela
89.- Pablo Mackenna
90.- Carlos Moena
91.- Clemente Perez
92.- Paula Molina
93.- Diego Muñoz
94.- Carolina Pulido
95.- José Ignacio Valenzuela
96.- Cristóbal Valderrama
97.- Manuela Martelli
98.- Ricardo García
99.- Mauricio Guerrero
100.- Gerard Casaubon

Ojo… no son todos necesariamente conocidos, o necesariamente jóvenes revelaciones, o destacados en el ámbito público, o conocidos, o cualquier otro parámetro distinto que el simple hecho de que a mi parecer son personas notables.

Ayer estuve con un tipo total y absolutamente zorreado. Un tipo al que conocí hace un año, que al principio me pareció perno, hiper ventilado, buena persona, etc. Y que ayer me pareció acabado. Nuestra relación es laboral, sin embargo, por diferentes motivos es más cercana que con otras personas con las que me une sólo un lazo comercial. Este cabro es joven y resulta que desde un año a esta parte ya está separado, muchísimo más gordo, tomando mucho, fumando mucho, comiendo mucho y quien sabe que mas mucho se está metiendo por ahí. Tuve la oportunidad de verlo en un almuerzo en un ambiente bien coloquial pero que no dejaba de ser de trabajo, donde literalmente hizo el ridículo, tomando, fumando, sacándose los zapatos, cantando, hablando fuerte, contando cosas fuera de lugar y en el fondo sobre revolucionado. No soy pechoño pero de verdad me tenia incomodo y a quienes lo acompañaban también. Perdió totalmente la brújula, se estresó, colapsó, no fue capaz de combinar ambiente laboral relajado con responsabilidades extremas. Se le fue de las manos su vida, frente a todos y, más que patético, lo encuentro triste, angustiante, preocupante, mal. Creo que mi generación y cualquier persona en el fondo de ahora en adelante, debiera comenzar a priorizarse en la vida, no perder el control de esta, ver hasta donde es capaz de llegar y ahí frenar, porque nadie te va a felicitar cuando te dé un pre infarto a los 30, o cuando tengas que gastar la mitad del sueldo en ansiolíticos o antidepresivos, o cuando en el fondo toques fondo y veas todo lo que has perdido. Todos tenemos un ritmo propio, es nuestro deber conocerlo, ser honesto con uno mismo, respetarse y desde ahí surgir.

Las últimas semanas han sido muy entretenidas, intensas, variadas, completitas a decir verdad. Desde que estoy oficialmente renunciado, con los papeles de la visa ya ingresados al consulado, con el pasaje comprado y básicamente todo aquello que dependía de mí para el viaje ya en curso, me siento sumamente relajado, feliz, lúdico por decir algo para remarcar la idea.
La reacción en el trabajo fue mejor de lo pensada, de hecho a veces he pensado que fue casi ofensiva y sospechosamente buena, pero no quiero hacerme mala espina y mejor veo el vaso medio lleno.
La reacción de la gente a la noticia, amigos, cercanos, compañeros de trabajo, etc, también ha sido muy buena. Alguien podría decirme que no tendría porque haber sido de otra forma, y tendría razón, pero lo que me sorprendió es que básicamente me felicitaban, se alegraban por mi y desde algún punto me envidiaban por hacer este giro, dejar todo y partir a estudiar a otro país.
Con los mas cercanos, amigos, familia, colegas, la cosa también va bien, yo me siento aprovechando al máximo los minutos con cada uno de ellos y, aunque no todos lo externalicen, creo que de cierta manera ellos también.
Así todo se ve bien, con esto no me dará menos pena, no será mas fácil partir, al contrario, pero al menos he logrado sacar lo buena de mi relación con cada persona que me rodea. Yo puedo ser más sincero, ellos más honestos y todos reales. Al menos así quiero creerlo.

Lo que hicieron los diputados colorines y que posteriormente hará Adolfo Zaldivar en el senado no va por el lado de que este sistema es perverso, que no se le debería dar ni un peso, que es una humillación para los santiaguinos, etc, etc, etc, es simplemente una manera de poner en jaque el liderazgo de Soledad Alvear, ya que si ella no logra alinear a los diputados de su partido menos podría alinear a la Concertación entera en un posible gobierno, mientras que si aplica mano dura y los expulsa podría ser acusada de dictatorial e incluso ser acusada legalmente por generar ordenes de partido en la votación de sus parlamentarios. Así nuevamente el colorín y sus aliados buscan centrar la atención en ellos como victimas y no en el bien común o nacional, ya una vez trataron de levantar una candidatura que no tenia ninguna base real en la sociedad (la del propio Zaldivar) y alzaron una candidata solo para opacar a Alvear (el apoyo irrestricto a Bachelet). Sin embargo, cuando dejaron la directiva y dejaron de ser los interlocutores validos frente al gobierno rápidamente se dieron vuelta la chaqueta, criticaron todo lo que hacia la actual administración y entorpecieron al máximo su labor. O sea simplemente le pasaron la cuenta. Ellos mismos hablaban de corregir el modelo, sin embargo, ninguna iniciativa real y concreta emanó en ese sentido en todo el tiempo que estuvieron en la primera línea y al final a uno le da más la impresión de un gran conjunto de ambiciones personales e intereses mezquinos que de real vocación publica.

He aquí un relato que escribí hace tiempo, el que encontré ayer mientras ordenaba mis cajas con cachureos:

“Ese olor, ese maldito olor de nuevo. Creí que después de ese día jamás volvería a sentirlo. No es muy común, pero al parecer siempre aparece cuando no hay manera de escaparse. Desde ese día en el cine creí que no lo volvería a sentir. Estaba con Raquel, veíamos una película de Almodóvar que de verdad me interesaba, en ese momento entró esa mujer, llegaba tarde y era gorda, por lo que su entrada se hizo notar. No pasó mucho tiempo para que su perfume avanzará decididamente hacia mi, logrando distraerme irreversiblemente de la pantalla. El problema no era la cantidad que se había echado, sino el aroma realmente hostigoso y abusivamente dulzón. Lentamente mi nariz empezó a irritarse, mi mente quedó en blanco, sólo sentía ese olor inundando toda la sala. Mi pareja notó mi incomodidad, pero la película la tenía demasiado abstraída como para percatarse del ataque del que yo estaba siendo victima. Ahora me lo encuentro acá. Desde el primer al último piso. Hay mucha gente y no se quien tiene el mal gusto de usarlo. Pero sólo quedan tres pisos. Camino hacia mi oficina aún algo consternado por la desagradable experiencia recién vivida. Ahí está mi secretaria. Lo primero que hago es abrir la ventana y sentir el smog. Cualquier cosa es mejor que esa fragancia. Tocan la puerta. Es Raquel reclamando que no la saludé en el ascensor. Desde que nos casamos que no se arreglaba. Hoy se ve linda. Me disculpo y la beso. De repente ese olor empieza a atacarme. Lo siento, de verdad lo siento.”

Lo transcribí tal cual lo encontré, hay varias cosas que modificaría, pero la idea fue mostrar cómo y qué escribía muchos años atrás (en el colegio de hecho).

Buenos días Periquito, como está?
Bien, gracias a Dios y ud?
Bien gracias.
Que bueno.

Fin de la conversación.

Y yo me pregunto: será muy egocéntrico decir por ejemplo……. Gracias a mi…?

No es que me quiera asemejar a Dios, simplemente asumir que uno puede estar bien gracias a las acciones que uno hace con ese fin. Dios nos puede entregar muchas herramientas y oportunidades para ser feliz o estar medianamente bien, pero dependerá también de la actitud de uno llegar a conseguirlo, querer estar mejor, ver el vaso medio lleno.

Aquí no busco quitarle meritos a nadie, por el contrario busco apreciar los esfuerzos que cada persona realiza día a día por tener una buena vida y aprovechar las oportunidades que se le presentan, aunque estas sean pocas, escasas y sutiles, sin actitud ni todo el oro del mundo te hará decir que estas bien y por el contrario un pan recién horneado te llevará a la gloria si tu decides que así sea.

Sigo plajeando las listas de la revista Wiken, y como siempre mis respuestas reflejan un estado de ánimo particular. Acá van mis elecciones para este fin de semana:

DESPERTAR: temprano, sin sueño, ojala con un día medio nublado para estimularme a hacer cosas.
COMER: frutillas, chirimoyas, cerezas, todas esas frutas que empiezan a aparecer en esta época, dulces y maduras como sólo en chile se pueden conseguir.
VER: Project Runway, placer culpable heredado de mi hermana y que por entupidos cambios de horario me pierdo muchas veces.
LEER: alguno de los dos libros que me compré en la feria del libro o en su defecto hojear tranquilamente todos los diarios que se acumularon de la semana y a los que sólo tengo acceso el fin de semana.
ARRENDAR: Piso compartido 2, rayé con la primera y siento cierto compromiso por ver la segunda parte.
ESCUCHAR: alguna canción que me guste, tener cómo anotar el nombre y quien la canta, para así después poder buscarla, tenerla y no pasar meses esperando que la pongan nuevamente en algún lugar.
MIRAR: todas las cajas de cachureos que tengo y decidirme de una vez por todas a botar, ordenar y limpiar.
ENTRETENERME: con mi ahijado, al que tengo muy botado, en cualquier lugar que él elija.
ASISTIR: a una noche de carrete completo con mi partner, sin arrugar a mitad de camino.
ALMORZAR: invitado, que alguien me invite, a donde sea, que yo no piense ni elija, sólo disfrute.
BEBER: un martín seco, una cerveza oceanik, un riesling chileno o tinto italiano.

Partiendo del hecho de que quiero mucho a mis dos viejos, no puedo negar que quiero mucho más a mi mamá. No tengo nada contra mi viejo, pero es con ella con la que tengo un lazo más fuerte y cariñoso. Así también, no me cabe duda que a pesar de que mi padre nos quiere mucho a sus tres hijos, es por mis hermanas por las que pena y muere. Claramente con ellas se le llena el alma y el corazón, las disfruta a cada cual en lo suyo y la cara de orgullo no la puede ocultar.
Es que mis hermanas son especiales y adorables, cada una en su propia dimensión por cierto. La mayor es como una flor y la menor como un chocolate relleno de trufa. Claro, porque mientras a la primera se le aprecia por su belleza y delicadeza, pero sin acercársele demasiado para no dañarla, a la menor uno la ve más como un placer mundano, más divertida, evidente y gozadora.
Una flor se mira, se disfruta de su sutil perfume y se agradece su presencia que lo ilumina todo, peor una flor no va por el lado de la pasión, va más bien por el lado de la delicadeza, de la hermosura, de la tranquilidad.
Un tentador bombón de chocolate, relleno con trufa en una situación especial, puede ser definitivamente un placer culpable. Es de esas cosas a las que uno, luego de una abundante y regada comida, no se puede negar. Es de esas cosas que te hacen levantar a media noche a buscar uno e irse con ese dulce gusto a dormir.
Pues ambas desde sus naturalezas me llenan. La mayor es 100 % oreja, compresión, calma, mucho apoyo. La menor es más impulsiva, divertida y coloquial, es de aquellas con la que a lo mejor uno no puede compartir una pena pero si una pasión.
Y ambas desde sus posturas me juzgan, me apoyan y me determinan. Me reflejo en ambas y las necesito a ambas.
He aquí entonces un pequeño homenaje para mis mujeres, que tanto quiero.

Olores que me parecen estimulantes, algunas, no todas, excitantes, en el fondo aquello que despierta mis sentidos y activa mi mente, mi cuerpo y mi piel:

1.- el olor a piel, quemada por el sol, levemente transpirada, después de un día de playa.
2.- el sofrito condimentado de las preparaciones de guisos antiguas.
3.- lavanda.
4.- sandía madura, fresca, recién cortada.
5.- el olor del cigarro cuando recién se prende.
6.- pólvora quemada.
7.- bencina.
8.- pelo de mujer recién lavado con shampoo de manzanilla.
9.- el incienso puro, el típico de misa, no estás versiones aromatizadas.
10.- vino, buen vino, tinto o blanco, da igual, pero honesto.
11.- a mar.
12.- trufa.
13.- café, 100 % café, cortado.
14.- a vendimia.
15.- a pan amasado recién salido del horno.
16.- a pipa.
17.- el olor de la levadura recién hidratándose y ambientándose.
18.- puré de papas, realmente de papas.
19.- unas gotitas de Channel Nº 5.
20.- mi olor a patas.
21.- olor a azufre en polvo que queda en las manos después de recorrer un viñedo tratado hace poco.
22.- especias en general, romero, tomillo y semillas de cilantro en particular.
23.- cilantro fresco, albahaca sin exceso y un discreto toque de ajo.
24.- tierra mojada.
25.- pasto recién cortado.
26.- muchas cosas que no recuerdo pero que tan pronto siento reacciono de inmediato.