martes, diciembre 19, 2006
Dormir
Yo no duermo mucho, especialmente los fines de semana. Considero casi un desperdicio pasar toda la mañana durmiendo, se acorta el día, uno termina haciendo las cosas apurado y en mi caso personal no descanso más.
Esto se traduce en el hecho que después de una noche de juerga me puedo acostar muerto a las 6 y al día siguiente ya estar despierto a las 9 o 10 de la mañana. Eso no quita que en algunos pasajes del día tenga sueño, pero de todas maneras rindo y no hecho de menos haber dormido más.
Durante la semana duermo más pero no mucho más, ya que si me acuesto temprano, despierto temprano también.
El punto es que este fin de semana dormí mucho. De sábado a domingo dormí casi 10 horas, luego me levante, me vestí, almorcé y vuelta a dormir unas 3 horas más. Solo desperté porque me llamaron. Y a las 10:30 de la noche ya estaba guardado de nuevo, listo para seguir durmiendo.
¿Qué me hizo dormir tanto? No sé. Había algo de cansancio acumulado por dormir poco el viernes. Por haber tenido una semana un poco pesada y con pocos momentos de relajo o de descanso real. También un poco de desanimo. Estoy entrando en otra fase un poco bajoneado, nuevamente me siento menos motivado, algo agobiado, desesperanzado, desarraigado.
En ningún lugar me siento feliz, en ningún lugar estoy pleno. La gente me entretiene pero rápidamente me aburre. No es culpa de ellos claramente.
No sé confiar. No sé dar ni recibir cariño, solo sé sentir su falta. Y frente a eso duermo. Mucho, mal a veces, con sueños intensos, sensación de cansancio al despertar, perdido, con sueño.
Son etapas lo sé, puede ser la época del año. Puede ser la forma de auto boicotearme. No lo sé.
Pero que tengo sueño, tengo sueño, y además sueños.
Esto se traduce en el hecho que después de una noche de juerga me puedo acostar muerto a las 6 y al día siguiente ya estar despierto a las 9 o 10 de la mañana. Eso no quita que en algunos pasajes del día tenga sueño, pero de todas maneras rindo y no hecho de menos haber dormido más.
Durante la semana duermo más pero no mucho más, ya que si me acuesto temprano, despierto temprano también.
El punto es que este fin de semana dormí mucho. De sábado a domingo dormí casi 10 horas, luego me levante, me vestí, almorcé y vuelta a dormir unas 3 horas más. Solo desperté porque me llamaron. Y a las 10:30 de la noche ya estaba guardado de nuevo, listo para seguir durmiendo.
¿Qué me hizo dormir tanto? No sé. Había algo de cansancio acumulado por dormir poco el viernes. Por haber tenido una semana un poco pesada y con pocos momentos de relajo o de descanso real. También un poco de desanimo. Estoy entrando en otra fase un poco bajoneado, nuevamente me siento menos motivado, algo agobiado, desesperanzado, desarraigado.
En ningún lugar me siento feliz, en ningún lugar estoy pleno. La gente me entretiene pero rápidamente me aburre. No es culpa de ellos claramente.
No sé confiar. No sé dar ni recibir cariño, solo sé sentir su falta. Y frente a eso duermo. Mucho, mal a veces, con sueños intensos, sensación de cansancio al despertar, perdido, con sueño.
Son etapas lo sé, puede ser la época del año. Puede ser la forma de auto boicotearme. No lo sé.
Pero que tengo sueño, tengo sueño, y además sueños.
